La selección Argentina derrotó a su par de Italia por 3 a 0 y se coronó campeón de la Finalissima que se disputó en el mítico estadio Wembley.
Lautaro Martínez y Angel Di María, ambos en el primer tiempo, y Paulo Dybala en la expiración del encuentro, marcaron los goles del triunfo albiceleste.
Con esta victoria, el equipo de Lionel Scaloni mira con optimismo su participación en el Mundial de Qatar 2002 que se disputará en noviembre.