Quimsa perdió con Instituto en tiempo suplementario por 96 a 91 y la serie final de la Liga Nacional de Básquetbol tendrá quinto juego, el próximo lunes desde las 22 en el estadio “Ciudad”.
El tiempo reglamentario concluyó igualado en 81.
A pesar de haber estado +19 en el primer cuarto y cuando en ese entonces muchos imaginaban una noche tranquila en Córdoba, Instituto y Quimsa volvieron a brindar un emocionante espectáculo en el Ángel Sandrín, en el Juego 4 de las Finales de La Liga Nacional. Terminó siendo victoria para la Gloria por 96-91, en tiempo suplementario y aguantando la reacción de una Fusión que a partir del segundo periodo equiparó tanto el partido como el marcador. Así, con este nuevo y gran triunfo del Albirrojo, las Finales están igualadas 2-2 y ahora todo se definirá en un quinto partido a disputarse el próximo lunes en el Ciudad de Santiago del Estero.
Nicolás Romano fue el máximo exponente de la noche para Instituto, no sólo por sus números sino que también por su incidencia en los momentos claves. El juninense, elegido como el Mejor Nacional de La Liga, terminó el encuentro con 22 puntos y 5 rebotes (23 de valoración), escoltado por Martín Cuello (18 tantos), Luciano González (15 unidades) y Tayavek Gallizzi (16 tantos más 5 rebotes). En Quimsa, lo más destacado pasó por las manos de Davaunta Thomas (18 tantos y 9 rebotes), Franco Baralle (16 puntos) y Sebastián Acevedo (15 tantos).
Instituto asfixió desde el primer minuto. Intentando demostrar que el golpe sufrido en el pasado tercer juego lo había dejado atrás, la Gloria tuvo mucha eficiencia y se abrió camino con los triples. Con Whelan, Chuzito González y Loku Cuello castigando con el tiro exterior, más el dominio de Nico Romano dentro de la zona pintada, los dirigidos por Victoriano dañaron fuertemente el aro rival y en apenas siete minutos sacaron una brecha sorprendente: 28-9, y +9 de diferencia para el local. Del otro lado se vio un Quimsa dubitativo, sin efectividad, con pérdidas y que rápidamente se vio apretado por el cuadro cordobés.
Sin embargo Quimsa cambió la cara rápidamente, dio vuelta de página a ese opaco primer cuarto y anuló a Instituto, apretando seriamente el marcador. Si bien Anderson se cargó rápido de faltas (sumó la tercera a minutos del cierre del segundo cuarto), con algunas apariciones de Thomas pero sobre todo con la segunda unidad, donde Baralle fue determinante, la Fusión se aproximó cada vez más y se fue al descanso largo a seis de diferencia (44-38). Y esa misma reacción se terminó de consumar en el tercer capítulo, ya que tras el ascenso santiagueño fue tal que lo empató en reiteradas ocasiones y hasta pasó al frente en el último cuarto.
Pero claro, estando ante los dos mejores equipos de la temporada era normal vivir un espectáculo a la altura, acorde a las Finales. Y así fue como prácticamente no se sacaron diferencias en ese cuarto periodo, y con un Quimsa que amenazó constantemente por llevárselo, delante tuvo un Instituto que se mostró inquebrantable, firme y sólido, como en toda la temporada. Eso llevó a que el partido ingrese en suplementario, donde la entereza y el trabajo de la Gloria terminó pesando. Romano fue el hombre del momento clave, con el ala pivote tomando responsabilidades y liderando a un equipo que permaneció sólido hasta el final, desahogándose con un triunfazo por 96-91 y llevando la serie a un quinto partido.
Con la serie igualada 2 a 2, el próximo lunes, desde las 22 horas y en el decisivo quinto punto de las Finales, Quimsa e Instituto volverán a verse las caras de regreso al Estadio Ciudad de Santiago del Estero. A todo o nada por la consagración y título de campeón.