Los de Pablo Prigioni sacaron adelante un juego sumamente incómodo y vencieron por 87-79, para meterse en la final del Preclasificatorio Olímpico.
Argentina logró el objetivo de meterse en la final luego de vencer por 87-79 a Chile, para llegar a la definición del Preclasificatorio Olímpico. Los de Pablo Prigioni superaron un duelo sumamente incómodo y físico, aún sin tener la mejor noche de larga distancia (7/25).
Los mejores del partido fueron Gabriel Deck, con 24 puntos, Facundo Campazzo con 19 unidades y 12 asistencias y Fran Cáffaro, con 14 unidades. Del lado chileno los más destacados fueron Nicolás Carvacho con 23 puntos y Sebastián Herrera con 17 unidades.
Argentina inició el juego apostando al pick and roll y la caída de Francisco Cáffaro, con 8 puntos. Allí llegó la preocupación por Luca Vildoza, quien sintió molestias en el aductor izquierdo y dejó la cancha a los dos minutos de partido.
La albiceleste tuvo paciencia para mover el balón y encontrar goleo colectivo. Sin embargo, en defensa sufrió a Nico Carvacho en la pintura para un Chile que buscó jugar al estilo de los de Pablo Prigioni, más lento pero efectivo, para cerrar el primer capítulo con los locales arriba por 25 a 20.
En el segundo cuarto el juego se tornó aún más físico y friccionado. En ese contexto la albiceleste no estaba cómoda y Chile sacó rédito de la mano de Carvacho y Felipe Haase. Sin embargo, a pesar del 4/15 de tres puntos, primero Campazzo y luego Gabriel Deck aparecieron para mantener la ventaja y llegar al entretiempo con ventaja por 46 a 40.
Al regreso del descanso Campazzo fue el dueño de la ofensiva y Argentina estableció un 7-0 tranquilizados, además de mejores acciones defensivas, sobre todo a partir de la doble marca sobre Carvacho. Primero desde ahí y luego con la dupla Fernández-Cáffaro en el poste bajo, la albiceleste tomó mayor fluidez en ofensiva y la máxima continuó en aumento, para cerrar el tercer cuarto al frente por 68 a 56.
Fernández de pivote resultó importante en los primeros minutos del parcial final, para que Argentina se estableciera desde la defensa y mantuviera la distancia. En ofensiva fueron claves las conexiones entre Campazzo y Deck. Chile siguió apostando al poste bajo con Carvacho y luego a Sebastián Herrera, que con dos triples bajó la diferencia a seis con menos de un minuto por jugar. Pero hasta allí llegó la reacción y Argentina selló su pase a la final del certamen.