El piloto neerlandés Max Verstappen ganó el Gran Premio de Arabia Saudita desde la pole position y Red Bull continuó su dominante inicio de la temporada de la Fórmula Uno con un segundo doblete en igual número de carreras.
El mexicano Sergio Pérez fue segundo en Yeda Corniche. El ganador del año pasado recibió la bandera de cuadros 13,643 segundos después de su compañero de equipo y triple campeón del mundo.
Es la primera vez que Verstappen, quien ganó un récord de 19 de 22 carreras el año pasado, triunfó en las dos primeras de una temporada.
Charles Leclerc terminó tercero para Ferrari, llevándose un punto extra por la vuelta más rápida y consiguiendo su primer podio de la temporada.
La victoria fue la novena consecutiva para Verstappen, racha que se remonta a Japón en septiembre del año pasado, y la 56 en la carrera del neerlandés de 26 años.
También fue el podio número 100 de su trayectoria, mientras que la victoria número 115 de Red Bull los elevó por delante de Williams en el cuarto lugar en las listas de todos los tiempos.
“En general, ha sido un fin de semana fantástico para todo el equipo y para mí. Me sentí muy bien con el coche y fue lo mismo en la carrera”, dijo Verstappen.
El británico Oliver Bearman, que debutaba con Ferrari en la F1 como el piloto más joven, con 18 años y 305 días, después de que el español Carlos Sainz se quedara fuera por apendicitis, terminó séptimo y fue elegido Piloto del Día.
“Hoy ha estado increíble”, señaló Leclerc de su compañero de equipo temporal, y agregó: “Es impresionante y estoy seguro de que está muy orgulloso. Todo el mundo se ha dado cuenta del talento que tiene y estoy seguro de que es cuestión de tiempo que esté en la F1”.
Oscar Piastri fue cuarto para McLaren, con Fernando Alonso quinto para Aston Martin y George Russell sexto para Mercedes. Lando Norris, de McLaren, fue octavo y Lewis Hamilton, siete veces campeón del mundo, noveno con Mercedes. Nico Hulkenberg sumó el último punto para Haas.
El coche de seguridad salió en la séptima vuelta después de que Lance Stroll, de Aston Martin, chocara contra el muro y se estrellara contra las barreras en la curva 22. El canadiense salió ileso mientras el resto de los pilotos, salvo cuatro -incluidos Norris y Hamilton-, entraron en boxes.