Independiente dejó escapar la victoria en los últimos minutos frente a Godoy Cruz, empatando 1-1 como local, en un partido que también estuvo marcado por la reciente polémica en el club con los jugadores. El técnico Julio Vaccari se refirió a la situación de Marco Pellegrino y Diego Tarzia, sancionados tras ser captados en una fiesta en un barco junto a varias mujeres del ambiente del espectáculo: “Fueron sancionados porque pusieron en riesgo la salud institucional, cuando eso pasa, hay que tomar medidas”.
Sobre la libertad de los jugadores en su tiempo libre, Vaccari fue tajante: “En su día libre pueden hacer lo que quieran. No lo comparto y no me gusta, pero son libres. Lo que pasa es que hay muchas redes sociales, mucho teléfono, sean vivos…”, sugirió, apuntando a la necesidad de mayor discreción por parte de los futbolistas.
A pesar de su desacuerdo con la conducta, el técnico dejó en claro que la sanción estaba relacionada con la protección de la imagen del club.
Por otro lado, el partido también estuvo marcado por los silbidos que recibió Joaquín Laso, quien regresó al equipo después de un conflicto con el club por cuestiones contractuales: “Me pone triste, muy triste”, confesó Vaccari, visiblemente afectado por la reacción del público hacia el jugador.
El entrenador destacó la profesionalidad de Laso, afirmando que siempre se entrenó con dedicación y compromiso, aunque reconoció que la situación contractual del defensor está cerca de llegar a su fin.
En relación al futuro de Laso, Vaccari fue claro: “Es un jugador que se entrena bien, se comporta como un profesional y predica con el ejemplo. Si me preguntan qué hay que hacer, Laso termina su contrato en diciembre y debería irse”. Con estas declaraciones, dejó entrever que el ciclo del defensor en el club estaría llegando a su final, a pesar de los esfuerzos del jugador por mantenerse en el plantel.
El empate no solo dejó sabor amargo por el resultado, sino también por las tensiones internas que vive el club, tanto en lo deportivo como en lo institucional. Con el futuro de varios jugadores en el aire, Vaccari enfrenta el desafío de mantener el equilibrio en un momento delicado para Independiente.