Abel Masuero tenía todo acordado para ser nuevo refuerzo de Chaco For Ever, sin embargo se dio cuenta que uno de los detalles que le exigía al club no se cumplió, por lo tanto, la operación se cayó. Según medios chaqueños, el defensor de 35 años observó que la casa que le ofrecían para hospedarse no contaba con una pileta, razón por la que el defensor rescindió el vínculo con el Albinegro.
Es que su exótico requisito no figuraba en el contrato a rubricar, razón por la que Masuero decidió no firmar su vínculo con la institución. Así, Chaco For Ever perdió un refuerzo de cara a 2024.
De esta manera, el elenco de Chaco buscará sumar una mayor cantidad de puntos de cara a la próxima temporada, tras una floja campaña en este 2023.