Max Verstappen ganó el Gran Premio de China y alcanzó su victoria 58ª en la F1 y que le sirve para disparar su ventaja en el liderato del Mundial, con 110 puntos.
El neerlandés no tuvo rival en toda la carrera, y desde el principio se despegó de la cola que lo perseguía. En la segunda posición terminó Lando Norris, que planeó una gran estrategia de cuidar neumáticos.
La carrera estuvo marcada por dos coches de seguridad consecutivos, que sumaron 11 vueltas neutralizadas en la fase en la que se decidían las estrategias. El mundo de la Fórmula 1 espera ahora por el siguiente Gran Premio: la ciudad de Miami, en sólo dos semanas.